sábado, 14 de julio de 2012

La canción de verano


Los españoles llevamos unos meses en los que tenemos más la sensación de estar viviendo un capítulo de “bricomanía” que otra cosa. Tras el anterior mandato en el que la frase favorita del señor Rodríguez Zapatero era la de: “no hay crisis”; nos hemos abonado en esta ocasión a la palabra “recorte”, con sus correspondientes sinónimos: tiempo de austeridad, tijeretazo, recesión, bono basura y prima de riesgo… Muchos estamos deseando conocer a Riesgo y que nos presente a su prima, pues nos parece descabellado que esa señora decida si un país se va al garete o no. Nos encontramos a la deriva entre un mar de opiniones muchas en contra y otras tantas a favor de los métodos usados para reflotar la economía europea y en concreto la española.
Del escenario clásico...

...al escenario actual.
La señora Angela Merkel como directora de orquesta y los caballeros de Bruselas cual batuta, se encargan de marcar el compás que debe seguir España, que atenta mira las batidas del brazo “ejecutor” del tempo a seguir. Le va a la casta a la señora Merkel eso de dirigir, pues Alemania tiene una grandísima tradición musical… esa que a base de recorte y más recorte va desapareciendo en España, pues si el IVA sube de un 7% a un 21% en espectáculos en directo podemos estar hablando  de la gran hecatombe de la cultura en nuestro país.

A los que poco o casi nada entendemos de economía, los términos empleados en los discursos catastrofistas de comentaristas televisivos nos pueden sonar más bien a chino. Sin embargo, un humilde servidor al menos sabe sumar y restar… y últimamente lo único que se hace en este país es restar, restar y dividir el resultado; con lo que bajo mi punto de vista estamos siguiendo una vieja estrategia para la cual no hay que hacer grandes cálculos ni tener una carrera en economía y es “la del puño cerrado”… de esta manera, tanto cuanto soy capaz de ahorrar significará mi capacidad de mejora… sin embargo, eso es algo que quizás podía funcionar en otros tiempos o lugares pero ahora y aquí NO!, ¿¡por qué!?... pues porque si todos vemos como necesidad vital, ahorrar, no gastar e invertir en lo imprescindible estamos creando un efecto que paraliza el mercado, consumimos menos, por lo tanto generamos menos trabajo, esto provoca que exista menos oferta de trabajo y con ello más gente en el paro… pero como he dicho anteriormente, yo no entiendo de economía, ¡SOY MÚSICO! y como músico no hago más que ver cada día que la cultura en este país ha pasado a ser un “bien de lujo”, que el “estado del bienestar” es inexistente, que la “ley de oferta y demanda” provocará que la cultura por ser menos demandada será todavía más cara y menos al alcance de todos los bolsillos… pero como dije queridos amigos, yo no entiendo de economía, soy músico, o eso intento.