martes, 5 de marzo de 2013

HTC One, ¿la llegada del Elegido?

Con una anunciada cuenta atrás que nos dejaba expectantes mirando hacia el 19 de Febrero, HTC introdujo la curiosidad en el mundo de la telefonía móvil que desde tiempo atrás asistía decepcionada a los últimos intentos de la taiwanesa por demostrar su potencial. Somos todos conscientes de que los logros de Samsung, junto con la todopoderosa Apple dejaban a HTC como el tercero en disputa, situación que se fue agravando tras la resurrección de Sony y el puñetazo en la mesa de LG; por ello HTC, a día de hoy, no era sino el recuerdo de aquella pionera empresa que apostó por un sistema operativo por aquella época desconocido para muchos de nosotros, acabando su propuesta atractiva quizás y bajo mi humilde punto de vista con el lanzamiento del Desire HD, del que aún hoy soy poseedor.

Es por lo tanto, que HTC es muy consciente de que su actual apuesta no es sino el intento de demostrar que aún existen y de que a esto de innovar y hacer smartphones son muy buenos e incluso que pueden ser los mejores. Para ello, se han reafirmado en aquella decisión que ya hicieron en su momento otorgando al Sensation XL de una pantalla de 4,7", además han dotado a su teléfono de una CPU de cuatro núcleos capaz de procesar a 1,7Ghz de la mano de un Snapdragon 600 de Qualcomm y una GPU Adreno 320 y 2 Gb de memoria RAM... ¿en qué se traduce esto? pues en pocas palabras, en fuerza bruta y potencia para dar y regalar. Quizás, en este aspecto, HTC ha tomado buena nota de los magníficos resultados que ha dado la Note 2 de Samsung y lo que ha hecho ha sido vitaminar aún más lo que a Samsung le ha funcionado, pero, lamentablemente para la taiwanesa, sus competidores no le han ido a la zaga y han hecho más de lo mismo, por lo que en cuanto a innovación se quedan cortos.

Entonces... ¿qué tiene este One de especial? quizás lo que más nos puede chocar, ha sido lo que bajo la mirada de aquellos que van buscando números altos se muestra como un paso hacia atrás; y es su cámara de 4 ultrapíxeles... En este sentido está claro que la apuesta de HTC es muy arriesgada pues pretende cambiar por completo el concepto de: a más megapixeles mejor cámara, en detrimento de una filosofía que apuesta por píxeles más grandes y un sensor que nos dará unas fotos más luminosas. Es aquí donde los datos en papel se quedan cortos y solo la experiencia diaria y un análisis comparativo en profundidad podrán darles la razón o no.

Pero más allá de la cámara, HTC mantiene su acuerdo con Beats Audio para regalarnos ese sonido que se ha hecho característico en sus smartphones, potenciándolo además con dos potentes altavoces que nos proporcionarán un magnífico sonido. Además su sistema de cancelación de ruido, nos pretende garantizar una mejor experiencia en aquello para lo que originalmente se inventó el teléfono. Si le sumamos la conectividad NFC, la novedad de incorporar un puerto infrarojos para usarlo como mando a distancia y demás... parece ser que HTC ha hecho bien los deberes, sin embargo y como ya he dicho, todo esto queda sobre el papel y pese a ser elegido como el Smartphone del MWC 2013 de Barcelona, aún queda el veredicto del usuario final, que es quien manda, sobre todo teniendo en cuenta que la sombra del futuro Galaxy S4 empieza a plantar cara a cualquier cosa que se le ponga por delante.